Tras la marcha de Isabel II se aprobó otra Constitución en la que se establece la Monarquía como forma de gobierno.
Por tanto había que buscar un nuevo rey y se eligió a Amadeo I de Saboya que renunció dos años después.
Ese mismo año se proclamó la Primera República, en la que el jefe del Estado era un presidente elegido por los ciudadanos.
Pero apenas duró un año la república porque hubo un pronunciamiento militar que instauró de nuevo la monarquía.
Amadeo I de Saboya |
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